No he leído el libro y no creo que haga falta porque entender que es uno de auto ayuda, permite darnos cuenta que estamos ante una película que va a intentar hacerte reflexionar, mostrando una historia de redención, de reencuentro con uno mismo, de buscar aquello quizá lo tenemos apartado.... 

Visualmente la película rinde bien. Aspectos técnicos bien cuidados (salvo alguna que otra fallita no perceptible a simple vista) y un elenco que cumple con su rol pero que bueno, no destaca lo suficiente. Y es que el principal problema que noté en Siete Semillas es que lo que intenta transmitir no se percibe con mucha facilidad. El humor está presente y es quizá el factor más importante como para que la historia no caiga en el aburrimiento y en lo previsible, porque sinceramente desde el inicio ya sabemos cómo va a terminar la película y cuáles serán los giros de ésta.

Al referirme a lo que es comedia, debo resaltar la chamba de Javier Cámara. De lejos destaca su papel y lamenté que no tenga mucho tiempo en pantalla. Son ligeramente destacables las secuencias con Carlos Alcántara a quien no vi muy cuajado con su personaje. Quizá todavía los roles de drama no le calzan bien, pero es quizá ahí donde flaquea la película, porque el personaje de Cachín es el principal y es sobre quien cae toda la carga dramática. Salvo cuando aparece con el actor español, no trasciende el personaje del protagonista.

La historia es de redención. Un hombre que lo tiene todo en material pero nada a nivel personal. Atraviesa por crisis, cae en el abismo y se vuelve a levantar gracias a un gurú que le muestra que la felicidad interna vale más que lo material. Sí, una historia vista tantas veces y que se conoce de pies a cabeza. Con un arco argumental ya trazado, uno espera que los giros doten de vida a la historia, pero son tan obvios que el desenlace resulta banal. Y le sumo a todo ésto la poca carga emotiva que sentí en los personajes. Mejor expuesto el humor que el drama, en una cinta que debería haber centrado todas sus fuerzas en transmitir emociones.

Siete semillas cumple con el formato que le gusta al espectador promedio. A mi no me conmovió ni me hizo reflexionar. Vi una historia que ya he visto en tantas películas y que no me ofreció nada distinto. Y quizá por la adaptación de un libro de auto ayuda sea que no haya tenido las suficientes variantes como para ofrecer algo distinto. De todas formas, le irá bien en taquilla (estoy seguro de eso).

Dirigida por Daniel Rodríguez Risco.